Aldea Global | O encontro da vicepresidenta segunda e ministra do Traballo, Yolanda Díaz, o pasado 11 de decembro co Papa Francisco no Vaticano levantou un notorio interese informativo en España e Europa, obviamente mediatizado polos antagónicos prismas de carácter editorial e político en distintos medios.
En eldiario.es analizaron como “El encuentro de Bergoglio y Yolanda Díaz resucita el odio de la derecha política y mediática al Papa Francisco”. Da conta do polémico tweet (inmediatamente borrado das redes) da responsable de Comunicación do PP de Madrid, Macarena Puentes, de cualificar esa visita como “cumio comunista”. O epíteto de “comunista” ao Papa Bergoglio estivo igualmente presente en diversos medios ligados a sectores de dereitas e conservadores.
Mesmo tratamento informativo atopamos en deia.eus nun artigo intitulado “Lo que escuecen las fotos de Yolanda Díaz con el Papa Francisco”, na que reproducen os comentarios reaccionarios desde diversos medios de comunicación, en particular cara Yolanda Díaz, a quen non dubidaron en cualificar de “comunismo prêt-á-porter” por su look durante o encontro papal.
En El Español destacaron ironicamente a “miragre” de Yolanda Díaz argumentando que a súa “visita al Papa sea oficial y dure más que la de (Pedro) Sánchez” fai un ano no Vaticano.
En La Razón, el columnista Francisco Marhuenda especulou co presunto efecto político e electoralista da visita de Díaz: “Yolanda en el Vaticano: Habemus candidati”.
Un parágrafo resulta revelador neste sentido: “No hay duda de que estos cuarenta minutos de audiencia papal son un golpe de efecto espectacular de la vicepresidenta. El Papa es una de las figuras más importantes del mundo y tiene mucho predicamento entre la izquierda política y religiosa. Por ello, Sánchez debería empezar a preocuparse, porque Yolanda ofrece una imagen de moderación que le puede resultar enormemente útil”.
Finalmente, en elplural.com, el columnista Enric Sopena criticou igualmente en “¿Por qué Yolanda Díaz no debió visitar a Francisco?” a campaña mediática lanzada polos medios de comunicación e a opinión pública de dereitas sobre esta visita.
O columnista considerou que “pues sí, les ha enfadado que con ese encuentro la vicepresidenta haya sido aplaudida por miles de votantes que, acaso sin reconocerse cristianos, comparten posiciones del Pontífice. Pues sí, les ha cabreado mucho que Díaz utilice el encuentro para reforzar sus proyectos políticos de futuro, pisando un territorio que no le corresponde”.